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Descubre Casa Lourán

Una casa rural llena de momentos

Una casa para disfrutarla.

Los juegos

Se tienes niños y niñas a tu cargo, Casa Lourán es sin duda, un destino lleno de maravillas para descubrir, un contorno cargado de estímulos donde saborear la libertad de la aldea.

La visita a nuestra granja, recoger los huevos de nuestras gallinas y darle de comer a los animales se puede convertir en el mejor parque de atracciones para vuestros hijos.

Nuestras ocas en el campo
Los recuerdos

Los olores, la leña, la piedra, la tierra... los objetos que con tanto cariño sobrevivieron hasta nuestros días, las comidas, la magia del colectivo, la unión con la naturaleza... son muchas las sensaciones que la persona que visita Casa Lourán puede vivir en forma de recuerdo.

'Me recuerda a la casa de la abuela', 'ay... este olor a humo', 'el sabor de la leche...', son palabras habituales que simbolizan la melancolía y el gozo de trasladarse a un tiempo que decorría sin prisas, que nos conecta con la esencia de la vida misma.

La lectura
El desván de las casas era un lugar lleno de misterios. Allí iban a parar objetos que la vida moderna iba relegando al ostracismo. Allí se guardaban recuerdos de quien ya no estaba, cosas viejas que dejaban de tener utilidad. Allí subían los niños y las niñas a descubrir secretos o a vestirse con las viejas ropas en el carnaval. La Casa Lourán tiene hoy un desván que se convirtió en una pequeña sala de lectura. Los secretos y los misterios quedan hoy escondidas entre páginas de papel. Algún libro de antropología y fotografía que explican la vida, libros antiguos que llevan décadas en la casa, novelas o poesía están disposición de quien quiera disfrutar de la lectura un día de lluvia. En una pequeña cuna de mimbre, se guardan también variados cuentos para niños y niñas.
Biblioteca en el desván
Lumbre
Al lado del fuego

El hogar, centro de la casa gallega. Alrededor del hogar fluía la vida toda. En el hogar se cocinaba y se comía, en el hogar se hablaba, en el hogar se contaban cuentos, de miedo o de risa, daba igual, en el hogar se cantaba, se jugaba, se soñaba. El hogar daba calor al existir de las personas.

En nuestra casa, el hogar sigue siendo lugar de encuentro, el fuego preside nuestro salón en cualquier estación del año cuando la meteorología acompaña.

El fuego en nuestra casa asa castañas en otoño, seca las botas después de un día de lluvia, acompaña conversaciones. El fuego no es un elemento decorativo, que también, pero el fuego en Casa Lourán está lleno de vida.

Las conversaciones

El placer de la conversación, o el placer del silencio; el placer del paseo o el placer del descanso; el placer de la aventura o el placer de la lectura.

Son muchos y variados los placeres que se pueden encontrar en un contorno donde los tiempos escapan de las prisas y los espacios son verdes y llenos de vida.

Tumbarse en la hamaca a escuchar los pajaritos, conversar en compañía en el cenador con vistas a la huerta o hacer fuego en el lar son algunos de los placeres que nos da la sencillez de la vida.

Los paseos

El gran placer de andar sin prisa, el paseo, el recorrer de los caminos que te llevan a humildes destinos capaces de sumergirte en el más sencillo de los placeres.

Desde nuestra casa podrás bajar al río do Canedo, visitar el molino de Lourán, un lugar lleno de encanto, pilar de la economía agraria de otros tiempos o llegar a la Capilla de la Ascensión ubicada en la Sierra da Loba desde donde se puede ver una hermosa panorámica del Val de Xestoso.

Durante los paseos podremos encontrar distintas muestras de fauna autóctona, avistar pájaros, cruzar prados rodeados de setos, cruzar viejos puentes o introducirnos en frondosos bosques.

Paseo por el campo recogiendo castañas
Cielo estrellado
Viendo las estrellas

Para apreciar la hermosura de un cielo estrellado no es necesario ser un gran especialista en astronomía. Lluvia de estrellas, la luna, los planetas visibles o las constelaciones se dejan ver en cielos alejados de las ciudades como un regalo que nos da sosiego e inspiración.

Los paisajes de un firmamento guardan un montón de sorpresas dentro de la inmensidad del cielo con solo alzar nuestra vista.

La contaminación lumínica es mínima en el cielo de nuestra casa, cada noche, cada fenómeno meteorológico, se puede convertir en un espectáculo maravilloso.

Mención aparte merecen las lágrimas de San Lorenzo en agosto que llenan el cielo de nuestra casa de estrellas fugaces por las que puedes pedir un deseo.

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+34 679 251 163

info@casalouran.com
Rastrebas, Val de Xestoso. 15315 - Monfero, A Coruña

Esto ha sido obra de Sr. Concejo